Actualizando a la versión 2.3.2

Me daba pereza. La verdad. Actualizar a la versión 2.3.2. Más que nada por tiempo. Pero resulta que hay un plugin simplemente increíble que se llama WordPress Automatic Update.

Os recomiendo el uso. Si funciona tan bien siempre se convertirá en una commodity.

¿Se transformará el OS en una commodity?

Hay detalles en la vida de uno que hasta que no te faltan por alguna razón no te das cuenta de lo necesarios que son. Pensemos, por ejemplo, en la electricidad. Cuando llegamos por la noche a casa y encendemos las luces de casa, no pensamos en la electricidad sino simplemente en el interruptor que hemos pulsado para la luz. Sólo cuando hay un corte de electricidad nos damos cuenta que para tener luz en casa hace falta. Es por su falta que recordamos el valor que tiene. Esto es lo que se conoce como una commodity. Y frecuentemente muchos aspectos de nuestra vida se proyectan sobre este tipo de recursos.El entorno de las organizaciones está plagado de estos. Desgraciadamente hay tecnologías que en ningún caso se han transformado en commodities. Ese es el caso para el sistema operativo. Y voy a hablar desde el punto de vista del usuario y de uno que ha pasado por diferentes sistemas operativos: Windows (98, 2000 y XP), Linux (diversas distribuciones entre ellas Suse, Debian y Ubuntu), incluso Solaris y, los últimos tiempos, Mac OSX.Como empleado de una organización (en particular en lo que se llama ahora tecnologías de la información), realizo un uso intensivo de ordenadores u otros dispositivos durante mi jornada laboral. Para mi trabajo es crítico tener herramientas cuyo funcionamiento sea el óptimo. Como en muchos otros trabajos, ¿os imaginais uan carnicería en la que a los seis meses el rendimiento de los frigorificos de carne disminuya? Pues en esas estamos. ¿Por qué es normal que a los seis meses el rendimiento de tu ordenador en el que tienes Windows XP cae en picado? Cuando digo normal es que es lo que ya lo esperas. Estas como contando los días, para que las aplicaciones empiecen a ir lento y finalmente aparezcan esas pantallas azules tan divertidas. Y claro, eso afecta a la productividad. Al menos, la mía.Con esto lo que quiero decir es que tengo que cuidar qué hago con mi ordenador. Cuidado con qué abro, cuidado con qué instalo, cuidado con qué hago en definitiva,… ya que el sistema detectará la entropía de mis acciones y decidirá el día menos pensado demostrarme que, independientemente del hardware que esté usando, el rendimiento debe pasar a mejor historia.En casa, por otro lado, la historia es otra. Soy usuario de Mac Os X desde hace ya dos años (y, por si te lo preguntas, sí, soy de esos que ya ha hecho su pedido para Leopard). Y estoy satisfecho, mucho. No solo por su usabilidad. Sino sobretodo porque me he olvidado de la parte fea del asunto. Quiero una máquina para trabajar. Tanto haciendo cosas triviales para un sistema operativo actual como crear un documento, modificar una foto o leer mis correos como bajarme un programa e instalarlo, decidir que no responde a mis necesidades y borrarlo. Y todo ello sin que se penalice el rendimiento o la estabilidad en modo alguno. Puedo centrarme en ser productivo. Eso es lo que quiero. Aunque, es verdad, me dirán algunos, que no existe sistema infalible. Pero demonios, ¿alguién espera que su nevera deje de funcionar a los dos años sino es por un defecto? Y eso no nos engañemos, sí que es una commodity.Desde mi punto de vista, uno de los aspectos en los que deberían fijarse las compañías que diseñan los sistemas operativos que usamos es si realmente pueden identificar su creación con una commodity. Mi humilde opinión es que la gran mayoría dista de acercarse (exceptuando Apple que está en esa senda).¿Qué opinan mis lectores? ¿Se transformará el OS en una commodity?